Tras terminar el curso, los
Rockets hacen balance. El GM
Daryl Morey y el entrenador
Rick Adelman tienen claro una cosa. La temporada ha sido buena pero hay que apuntalar unos cuantos aspectos si quieren aspirar a pasar de 1ª ronda de play off.
El bloque es bueno, pero con
Tracy McGrady y
Yao Ming perdiéndose 25 partidos de media cada uno al año por recurrentes lesiones, necesitan añadir un jugador que pueda aportar puntos de forma rápida y efectiva. Precisamente T-Mac se operó el martes pasado de molestias en el hombro y la rodilla y estará de baja hasta agosto. Battier y Alston también serán operados dentro de poco para solucionar problemas.
Corey Maggette puede ser esta opción. El jugador de los Clippers está bajo contrato aunque parece bastante probable que ejerza su opción para salirse del mismo y optar a la agencia libre. Con 28 años, es un probado anotador y aspira a conseguir cuanto antes un nuevo contrato multianual que le dé tranquilidad en su madurez deportiva. Actualmente cobra 7'8 millones y el año que viene cobraría 8'4.
La dificultad de los Rockets estriba en su
salary cap. Para el año que viene tienen comprometidos entre 60 y 65 millones de dólares (dependiendo de cómo hayan gestionado los
buyouts de
Jackie Butler y
Justin Reed , despedidos a principios de la temporada pasada, que sumarían 4 millones el año que viene) superando ligeramente el límite salarial y sólo podrían ofrecerle la
mid-level exception, que rondará los 6 millones.
Como margen de negociación, dejando aparte traspasos que incluyan hombres clave de la plantilla, disponen de la entrada en último año de contrato de
Bobby Jackson , favorito de Adelman pero también muy veterano, que cobrará 6 millones de dólares el año que viene.
Los Rockets tienen asegurados en plantilla a partir de julio a 12 fichas de las 15 posibles:
Rafer Alston ,
Aaron Brooks y
Steve Francis como bases
Tracy McGrady ,
Luther Head y
Bobby Jackson como escoltas
Shane Battier y
Steve Novak como aleros
Luis Scola y
Carl Landry como ala-pívots
Yao Ming y
Loren Woods como pívots
Woods tiene un contrato no garantizado y lo probarán durante el verano.
Chuck Hayes acaba contrato y se plantearán la necesidad de renovación del rocoso forward. También quieren renovar a
Dikembe Mutombo tras su enésima gran actuación ante la baja de Ming pero tendrán que convencerle para seguir al tiempo que no pueden encomendarse a él para salvar la papeleta en la pintura. Ambos jugadores tienen que renovar por poco dinero para no lastrar las cuentas.
Los Rockets necesitan un anotador, sí, y piensan en Maggette. No obstante, también necesitan un hombre en la pintura que supla con garantías a Ming y Mutombo puede ser un arreglo temporal pero va a cumplir 42 años y no pueden recurrir a él toda la vida. Esperan mucho de
Carl Landry y
Luis Scola el año que viene tras las expectativas que han generado.
También esperan bastante de
Aaron Brooks , el joven y dinámico base que gusta mucho a Adelman, para que ayude a Alston y está por ver lo que pueda hacer
Steve Francis , el cual acaba de oficializar que cumplirá su opción para continuar un año más tras jugar sólo 10 partidos por una rotura en el cuádriceps. Francis tiene 31 años y no quiere acabar tan pronto su carrera. El antiguo
All Star piensa que aún puede dar mucho de sí y si consigue estar sano puede ser un gran fichaje para los Rockets, que notaron con la ausencia de Alston una gran pérdida de dirección.
La primera parada en la agenda del GM Morey es el campus
pre-draft de Orlando. Houston dispone de un nº 25 de primera ronda pero es en la agencia libre donde encontrarán las piezas que necesitan y deberán hacer muchas maniobras para conseguir el espacio necesario para ofrecer un contrato competitivo a los buenos agentes libres disponibles.
